miércoles, 4 de noviembre de 2009

Cómo hacer del fracaso un éxito

Desde que somos niños aprendemos que cuando fracasamos no nos mecercemos el amor de nadie; por ello es tan dificil encarar los fracasos cuando somos adultos. Nunca nos dieron las herramientas necesarias para superar esta parte tan propia del ser humano, equivocar, caer es parte de la vida; nadie tiene los triunfos asegurados y la cotidianidad puede ser una ruleta rusa, en la que no nos resuta conveniente apostar. De esta manera podemos tomar dos posiciones muy claras: o no tomamaos ningún riesgo para no fracasar; o nos arriesgamos y en el intento sufrimos hasta lo indecible.
El primer caso representa la cobardía a la que en ambos casos se puede acudir, es evidente en el primero el porque, pensemos cuantas cosas no hemos hecho por temor, cuantos instantes maravillos desperdiciamos por miedo. En el segundo caso una vez que fracasamos el mejor refugío es el miedo y se produce lo que se conoce como aplanamiento emocional, esto quiere decir: no siento así estoy a salvo, no tomo riesgos. Lastimosamente está "técnica" tampoco funciona ya que somos seres emocionales y huir de ellos no hace que desaparezcan los sentimientos. El sentimiento más potente al que nos vemos expuestos es la culpa, siempre usamos es pasado para herirnos a nosotros mismos. Por ello la primera regla para enfrentar el fracaso y convertirlo en éxito es: No vayas al pasado diciendo: "y si hubiese hecho esto, o aquello?"; esas preguntas no tienen respuesta porque ese ahora ya no existe, en cambio eres dueño de tu presente, de tu realidad.Vive aquí y ahora.
La segunda regla es controlar la mente y no permitir que está te controle a ti. Recordemos que no existe un juez más severo e intolerante que uno mismo y eso hace que no podamos perdonarnos los errores, y con ese salvocunducto, el Perdón podemos continuar. Un fracaso nos recuerda al anterior y solo sentimos que somos perdedores. No le permitas hacer eso a tu mente recuerda: tú eres más poderoso.
La Terecera regla es la acción. Si estás en problemas, deja de lamentarte y pon manos a la obra para solucionarlos, recurrir al pasado a los por qués y cómos, no te hace bien y desperdicias mucha energía que sería valiosa y super util para tu ahora, usa bien esa energía y conseguirás excelentes resultados, piensa en el tiempo que desperdicias lamentándote. Recuerda la oración que dice: "Señor dame sereneidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar y valor para cambiar las que si puedo y sabiduría para entender la diferencia."
La Cuarta regla es la más importante, debes dejar de lamentarte y encontrar el coraje para salir del atolladero en que te encuentras, cuando te veas como una victima en eso te vas a convertir, pegúntate a ti mismo: "soy una víctima y de quíen???" la verdad es que no lo eres; excepto de ti mismo, deja de hacerte daño y has lo que debas para ser feliz.
La Quinta regla es recordar que la felicidad no está fuera de ti, en ningun objetivo,en nada material o físico, la felicidad es una virtud que se halla alojada dentro de tu Ser, búscala, al encontrarla te darás cuenta que aunque no tenga nada puedes sentir paz dentro de ti. Así que deja de buscarla fuera y empieza a practicar sintiendola, la felicidad puede convertirse en hábito y de eso se trata, deja de ser una víctima ese hábito no te hace bien, usa el hábito de la felicidad. Es simplemente una desición, tómala ahora!
Y finalmente para que esta receta funcione hace falta mucha fe, sí esa mismo, siempre nos olvidamos que Dios nos cuida, no importa como lo llames: Alá, Jeová, Yavhé, Buda, Krishna, Energía Universal, es lo mismo, el es el Todopoderoso y siempre sabe lo que es mejor para nosotros, muchos de ustedes dicen creer en ese Ser, pero no confían en Él, cuando tienen problemas es justo el momento para hacerlo, déjense llevar por los sanadores brazos de Papá, Él simpre está ahi para nosotros, nunca nos desampara y sabe que muchas veces a través de la adversidad encontramos los caminos del amor y la belleza, así que dejen de pelear con Dios, si algo no sale como ustedes querían no se enfurezcan, no se llenen de ira y de impaciencia, siempre después de la tormenta llega la calma y con esa calma podemos mirar con sabiduría hacia atrás y comprender el porque de lo que nos ocurre, y si tenemos suficiente sabiduría lograremos aprehenderlo para siempre, así jamás volveremos a pasar por esa misma situación.
Si estás pasando por momentos difíciles haz lo que te sugiero, si sientes que necesitas ayuda ya que no lo logras solo puedes contactarme para una cita personal al: 098 31 25 40
o escribirme a mi mail heyandradebon@hotmail.com
Un abrazo en Luz
Heyliette
e

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